sábado, 29 de enero de 2011

Especial

A veces alguien especial se cruza en tu camino. Lo sabes. Tu mente lo sabe, hay tanto por aprender y compartir, tanto que te gustaría saber, escuchar, hablar... Tu cuerpo lo sabe, se mueve como atraído por un imán, tus gestos te delatan y, la mayoría de las veces, te das cuenta "después" de hacer alguna tontería. Pero qué sería de mí si mis gestos no me delataran... Nada cambiaría nunca, todo seguiría igual, porque no sabría salir de mi cabeza, demasiado hiperactiva cuando me falta un golpe de realidad para guiarme y saber qué hacer, por dónde van los tiros.

A veces parece que ese alguien especial viene acompañado de una serie de circunstancias destinadas a cambiar tu vida. Estás descubriendo un mundo nuevo, afrontando miedos y enfrentando deseos. Compartir una parte importante de tí sin dar por hecho que nadie tiene ganas de escucharte o sin dejar que los sueños sean sólo la purpurina que te echas por encima antes de dormir.

Sea como fuere, todo esto me gusta, aunque no sé dónde acabará. En este nuevo volantazo en el camino he descubierto otro rincón en el que me siento yo misma y que me invita a crecer, a crear, a conocer gente.

Y los amores... pues para bien o para mal (digo yo que para bien) son parte de la vida, son parte de mí. Sería peor que no me enamorara nunca :) (o que todo quedara siempre encerrado bajo llave dentro de mí).

Por lo demás, exámenes, exámenes, exámenes. Menos mal que sólo queda una semanita.

PD. pequeños MIRes, ¡¡felicidades por su recién adquirida libertad!! Que todo fuera genial, que ahora toca descansar :)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Bienvenidas "pequeñas cosas"!!

:)

Pilistruski dijo...

Que acabe cuando y cómo tenga q acabar y Bienvenido sea :)